Cinco encantadores mercados europeos ideales para visitar durante tus vacaciones de Navidad
Los mercados navideños son una de las tradiciones mejor conservadas de los países de Europa Occidental. Algunos de ellos se celebran desde hace más de 500 años, y cada vez son más populares entre los turistas que buscan vivir en un lugar especial toda la magia de estas entrañables fiestas.
Para que te vayas contagiando del espíritu navideño, a continuación te presentamos cinco encantadores mercados europeos ideales para visitar durante tus vacaciones de Navidad. ¡Toma nota y empieza a organizar tu viaje!
El Mercado de Navidad de Bautzen, el más antiguo de Europa
Alemania es uno de los países con mayor tradición de mercados navideños. En este país centroeuropeo se celebran cada año más de 2.500 mercadillos navideños, aunque, por su antigüedad, merece una especial mención el Mercado de Navidad de Bautzen.
El Bautzen Weihnachtsmarkt se celebró por primera vez en 1384, aunque sus orígenes no tienen que ver con la Navidad, sino con la celebración de un mercado libre permitido por el Rey Wenceslao a sus súbditos durante la temporada de Adviento, época en la que estos podían comerciar sin pagar tributos a la Corona. Posteriormente, la influencia de la Reforma Protestante acabó por cambiar su iconografía hasta convertirlo en un mercado dedicado a la venta de productos navideños. Así, destacan especialidades como el vino caliente especiado, conocido como glühwein, y exhibiciones de música y danza tradicional, para las que los locales se engalanan con los típicos trajes de la región.
A lo largo de los años, este pequeño mercado fue creciendo y especializándose hasta convertirse en un gran atractivo para miles de turistas que recorren sus calles disfrutando de su colorida decoración y de la increíble oferta de artesanías, juguetes, piezas decorativas y manjares culinarios que ofrecen las decenas de puestos navideños que abarrotan las pintorescas calles de su centro histórico
El Mercado Christkindlmarkt, magia navideña a las orillas del Danubio
Desde finales de noviembre hasta la víspera del Día de Navidad, Austria se engalana de festivos colores y guirnaldas luminosas para celebrar la temporada de Adviento. De los cientos de mercados que plagan este hermoso país, destaca el Mercado Christkindlmarkt de Viena, que tiene lugar en la Plaza del Ayuntamiento, tiñendo la ciudad de luces, colores y olores con los que se te hará la boca agua.
Las decenas de puestos en las que artesanos y cocineros muestran sus piezas y recetas culinarias contribuyen al ambiente festivo creado por las elegantes decoraciones navideñas, convirtiendo la plaza en un lugar mágico en el que pasear disfrutando de un suculento cucurucho de castañas asadas mientras escuchas los villancicos entonados por los magníficos coros que se dan cita en la capital austríaca durante estas fechas.
Los más pequeños, además de poder jugar con la nieve y maravillarse con los miles de luces y figuras que engalanan los diferentes árboles de Navidad que decoran la plaza, también encontrarán diversos lugares y actividades especialmente pensados para ellos, como el espectáculo del Palacio Encantado, el Gran Belén o la Oficina de Correo “Nubes”, donde podrán pedir sus deseos de Navidad.
El Mercado de Navidad de Staré Mësto, cuando la vieja Praga se viste de gala
Las Navidades en Praga son también un hervidero de mercadillos y pasacalles que recorren los hermosos parajes de la capital checa para disfrute de locales y visitantes. Entre todos ellos, destaca el Mercado de Plaza Wenceslao y Staré Mësto, en el casco histórico de la capital checa.
Esta ciudad histórica muestra ya de por sí una encantadora belleza, encarnada en su peculiar arquitectura y en sus estrechas y laberínticas calles. Sin embargo, las fiestas navideñas contribuyen a acrecentar su encanto con sus luces, colores y olores, que crean una sinfonía navideña inolvidable.
No podrás resistirte a parar en cada uno de los 70 puestos que llenan plazas y calles con todo tipo de artículos, como juguetes de madera, entre los que vale la pena destacar los típicos cascanueces y marionetas; o auténticas delicias gastronómicas cuyo olor conquista el ambiente. Te recomendamos que no dejes pasar la oportunidad de disfrutar de un tradicional plato de cerdo asado o de unas salchichas a la barbacoa, y que degustes el típico trdlelnik, un postre checo relleno de chocolate o mermelada cuyo olor te embriagará.
El Mercado de Navidad de Tivoli, la tierra de las maravillas navideñas está en Copenhague
La capital danesa es también un lugar irresistible para pasar las vacaciones de Navidad, sobre todo para las familias. Si viajas a Dinamarca estas fiestas, no puedes perderte el Mercado de Tívoli, que se celebra durante el mes de diciembre en los Jardines de Tívoli, un parque de atracciones que durante el último mes del año se convierte en una auténtica tierra de las maravillas navideñas.
El mercadillo navideño se compone de cabañas de madera en las que encontrarás todo tipo de recetas típicas como el glögg, la versión danesa del glühwei, además de una amplia variedad de confituras de fruta y otros aperitivos dulces. Si lo deseas, también podrás comprar típicos adornos navideños y juguetes artesanales tallados en madera.
Sin embargo, lo más representativo de este mercado es su decoración, donde luces y colores recortan las siluetas de sus impresionantes edificios y atracciones contra el cielo, convirtiéndose en lugar de lo más mágico durante la noche.
Los más pequeños se lo pasarán en grande en las decenas de atracciones con las que cuenta el parque, uno de los más antiguos de Europa, entre las que destaca la gran montaña rusa de madera.
El Mercado de Estrasburgo, el país de los sabores navideños
Alsacia es un lugar donde vivir toda la magia de las Navidades. Esta pequeña región francesa alberga una gran cantidad de mercadillos navideños que se esparcen a lo largo de sus encantadoras ciudades y villas dotándolas de luz y colorido. Entre todos ellos, uno de los más pasiones levanta es el Mercado de Estrasburgo, en la comarca conocida como El País de los Sabores.
Con sus centenares de puestos, es también uno de los más grandes de Europa, lo que te permitirá perderte por su bullicioso ambiente, disfrutando del saber hacer de los artesanos que venden sus juguetes y otras piezas de madera entre las que destacan los típicos cascanueces. También podrás dejarte fascinar por la infinita diversidad de adornos navideños que encontrarás para colgar del árbol, así como por los suculentos manjares típicos de estas fiestas, como el pan de especias o los tradicionales bretzels.
¿Ya sabes cuál visitarás estas Fiestas? Está claro que, elijas cual elijas, pasarás unas vacaciones de Navidad inolvidables.